jueves, 28 de agosto de 2008

Se acabó

Cierra la puerta. Hoy no quiero volver a salir por ella, ponerme un antifaz que no me pega y sonreir, para que todos crean que sigues siendo la misma, que nada te perturba y mucho menos que sientes un gran vacío por dentro. Por eso, pon música lenta y déjame que olvide. Que mañana será otro día y los problemas, durmiendo, se olvidan 8 horas más.
No lo intentes, no me pienso levantar de la cama. No voy a cojer el teléfono. No voy a pronunciar nada que no quiera decir. Voy a dejar de balbucear y de llorar, porque no soy una niña. Ahora tomo decisiones. Los mayores siempre toman decisiones ¿ a que sí ? Por favor, ¡cambia de música! llévame a otro sitio que no sea éste, que no se parezca, que sea diferente; Cámbiame de lugar... hazlo, confia en mi, ya no soy una niña.